11 de noviembre de 2014

La Cigarra y la Hormiga Updated


Llega un momento en la infancia de toda persona, en el que alguien -habitualmente un familiar muy cercano y más mayor y sabio-, le hace la GRAN REVELACIÓN, contándole la famosa fábula de "La Cigarra y la Hormiga".


Todos conoceréis de sobra la historia y a sus dos protagonistas.

Por un lado, estaba la Cigarra: despreocupada, gandula y cero previsora, lo suyo era cantar, tocar la guitarra y holgazanear durante tooooooodo el verano. Su máxima era "Carpe Diem", vivía la vida sin preocuparse lo más mínimo por lo que pudiera pasar al día siguiente.
Ay, esa Cigarra feliz y holgazana con la que -casi- todos nos hemos sentido identificados en más de una ocasión.

Por otro lado, estaba la Hormiga, que era todo lo contrario que la Cigarra: trabajadora, constante, ahorradora,... Durante el verano, mientras la Cigarra cantaba y cantaba sin pegar ni chapa, la previsora y laboriosa Hormiga acarreaba granos de trigo bajo el intenso sol, para después tener alimento cuando llegara el frío.

Pues bien, pasó el verano, el otoño y llegó el crudo invierno. Y mientras la trabajadora Hormiga estaba tan requetebién en su casa, calentita y con muuuucha comida, -porque se lo había currado-, la infeliz de la Cigarra las pasaba canutas, y aterida de frío, tenía que pedir ayuda y cobijo a la Hormiga, quien finalmente se apiadaba de ella y la acogía, eso sí, no sin antes echarle en cara su actitud despreocupada.



Fin de la historia.
Después de la moraleja, tu abuelo -o la persona que te contaba la historia-, te hacía la inevitable pregunta:

Y tú, ¿qué quieres ser, Cigarra u Hormiga?

Y ahí te quedabas tú, a tus 6-7 tiernos años, cavilando:

-Ostras, Cigarra no, ¡ni de coña! Al principio se lo pasa muy bien, pero mira cómo acaba... No, no, hay que ser Hormiga.

Y así es como, desde bien pequeños, con una aparentemente (pero nada) inocente fábula, nuestros mayores nos inoculaban ya el virus del esfuerzo, la constancia, la previsión, el trabajo duro y el ahorro. (Cosa que se agradece, eh).

Ésta es una de esas enseñanzas que te hacen "clic" en la cabeza. Y que una vez la aprendes, ya no hay vuelta atrás. A poco responsable que seas, el runrún de la Cigarra y la Hormiga te perseguirá toda la vida.

-En épocas de exámenes en la Universidad, cuando ves que tienes dos toneladas de apuntes y te lo estás dejando para la noche de antes del examen. Runrún.

-Cuando estás a dieta y tus amigos dicen de ir a cenar a un italiano. Runrún.

-Cuando quieres ahorrar, pero llegan las navidades, vas a la FNAC y te lo comprarías TODO. Runrún.

Y es que la historia de la Cigarra y la Hormiga se puede aplicar a mil aspectos de nuestro día a día. A los estudios, al tema económico, al plano laboral...

Lo fácil, lo chachi, sería poder ser como la Cigarra, pero sin las consecuencias de ser Cigarra. Vivir la vida loker sin preocupaciones, disfrutar el momento, cantar y bailar, gastar sin límite, no tener que ahorrar para tener unos eurillos, ni trabajar para ganarse la vida.
(Bueno, los hay que tampoco tienen que ahorrar ni trabajar, tiran de tarjetas black, fraudes fiscales, cuentas en Suiza, y listo. Pero no es el caso; me refiero a gente honrada, que  sois los que me leéis. No me imagino a Rato, Bárcenas o a Pujol leyendo mi blog).

En cambio, lo difícil, lo coñazo, al menos para mí y supongo que para muchos, es ser Hormiga.

Todos conocemos de sobra la teoría, pero luego, llevarlo a la práctica no es tan fácil.
Desde luego, si ser Hormiga fuera fácil no tendría mérito. Ni estaría tan valorado. (A veces, incluso un pelín sobrevalorado).

Yo creo que nuestra naturaleza hedonista nos hace ser Cigarras.
Todos tenemos un Lado Oscuro de la Cigarra innato y poderoso. Es como Anakin Skywalker y el Lado Oscuro de la Fuerza. O como Frodo y el Anillo.


Nos esforzamos por contrarrestar ese Lado Cigarra con un Lado Hormiga que nos sacamos de la manga.

Sin embargo, hay gente que acaba totalmente absorbida por el Lado Oscuro de la Cigarra. Se rinden absolutamente a él.
Son las Cigarras Puras. Gente a quien no le compensa el esfuerzo de ser Hormiga y han decidido vivir la vida sin preocupaciones, sin previsión, sin ahorrar, sin trabajar (o trabajando lo mínimo).
Piensan que bueno, en invierno hace frío, en tiempos de crisis se pasa mal, pero luego tampoco es tan terrible. (Y siempre habrá alguna Hormiga caritativa que nos acoja en su calentita casa). Haberlos, haylos.

Luego estamos los que intentamos luchar y vencer a nuestro Lado Cigarra con nuestro Lado Hormiga. A veces lo conseguimos, otras no tanto, pero ahí estamos. En una lucha sin fin entre el quiero y el debo. Entre el Me echaría una siesta de tres horas y 5 cm de baba, y el Tengo que estudiar toda la conjugación francesa. Entre el Me comería toda la caja de Chips'Ahoy, y el Debo cuidarme. Entre el Me gastaría el sueldo en libros, ropa, maquillaje, etc... Y el Tengo que ahorrar que estoy pelada y en paro.

Luego están las Hormigas Puras. Son pocas, pero todos conoceréis a alguna o algunas. Yo admiro su tesón, su capacidad de trabajo, su organización, su capacidad de ahorro, su austeridad (esa palabra tan repetida por los políticos, pero que tan poco se aplican a ellos mismos).

Aunque a veces a las Hormis Puras se les va la olla.
Es esa gente que no trabaja para vivir, sino que vive para trabajar.
Esa gente que se pasa la vida ahorrando, ahorrando, ahorrando... Y en realidad, si les preguntas para qué, tampoco tienen un motivo real para ahorrar.

Dicen: "Ahorro por si acaso, a modo de previsión".
No es "Ahorro para comprarme un coche o una casa", "Ahorro para poder hacer ese viaje que tanto he soñado"... No. Es "Ahorro porque empecé a ahorrar un día siendo muy niño después de que mi abuelito me diera un caramelo Werther's Original y una moneda de 5 duros y me contara la historia de la Cigarra y la Hormiga".
Y se les fue de las manos y ya no pueden dejar de ahorrar, por el simple hecho del placer que les produce el mero hecho de ahorrar. De acumular dinero.
Para ellos, ahorrar no es un medio. Es el fin en sí mismo.

Decía que admiro a las Hormigas Puras, pero hasta cierto punto, eh. Algunos me dan un poco de penica. Creo que no disfrutan la vida, realmente. Aunque ellos dicen ser felices así.
En mi opinión, han sido atrapados por el Lado Oscuro de la Hormiga, lo cual también tiene sus inconvenientes, aunque nuestro abuelito no nos lo contó el día que nos salió con la dichosa fábula.

Para mí, todos los extremos son malos. Ser 100% Cigarra es malo, por supuesto. Ya nos lo enseñaron de sobra con el cuento. Pero ser 100% Hormiga... uf, no sé yo hasta qué punto es positivo.
De hecho, creo que si bien las Cigarras Puras llegan a un límite de dejadez y vagancia del que ya no suelen pasar o es muy difícil, las Hormigas Puras pueden llegar a límites de capacidad trabajo y ahorro realmente patológicos. A veces dan miedo.

En un punto medio está la virtud, pienso yo. Ser Hormiga entre semana y Cigarra los fines de semana.
Pero a veces es taaaan difícil vencer a la Cigarra que todos llevamos dentro... ¿A vosotros no os pasa?

Y vosotros, ¿qué sois: Cigarra, Hormiga, o qué porcentaje de cada una? 

3 de noviembre de 2014

Cuerpos perfectos

A ver cómo consigo expresar mi opinión sin contradecirme. Porque la verdad es que tengo una opinión un tanto contradictoria en este tema. Por un lado pienso "oh, sí, me parece súper indignante", pero por otro digo: "tampoco es para tanto, ni es la primera vez que lo vemos".

Empezaré por el hecho en sí: famosa firma de ropa (lencería para más señas), la lía parda y desata la polémica con una campaña publicitaria. Os suena, ¿no?

La campaña, en concreto, es ésta:


Como se puede apreciar en la foto, 8 modelos (delgadas, como suelen ser las modelos, nos guste o no) lucen modelitos de la firma Victoria's Secret bajo un titular que reza: The Perfect "Body".

Como cabe suponer, la indignación de un amplio sector de la población (especialmente femenina, joven y norteamericana) no se ha hecho esperar. La opinión generalizada es que esta campaña hace apología de la anorexia-bulimia.

Porque claro, para Victoria's Secret (en adelante, VS), esos 8 cuerpos son un ejemplo de cuerpo perfecto. Todo lo que se salga de ese canon, es imperfecto.
Por tanto, si eres más bajita, o más curvilínea, o más culona, o más negra, o más asiática, si tienes tripa, o las caderas más anchas, la cintura menos marcada, las tetas más pequeñas (o más grandes)... que las chicas que se nos muestran en esa foto, eres obviamente imperfecta.
Aham... 

Cómo no, mensajes como éste nos generan frustración y descontento con nuestros propios cuerpos (imperfectos), porque se nos está lanzando un canon de belleza inalcanzable... Y de eso a la anorexia-bulimia va un paso.

Bien, estoy de acuerdo... en parte.
A ver...

Para empezar: estoy de acuerdo en que ni VS ni el sursuncorda es quién para decirle a nadie qué o cómo es un cuerpo perfecto.

Por otro lado, creo que toda imagen de perfección, nos la venda quien nos la venda, desde VS a Pastas Gallo, es inalcanzable, per se. Nadie es perfecto. N-A-D-I-E. Y tampoco hace falta ser perfecto para que la gente de nuestro alrededor nos quiera. Ni hace falta ser perfecto para gustar, para atraer y para ser amado.


Tampoco son perfectas las 8 modelos de la campaña de VS. Son altas y delgadas, más guapas unas que otras, pero ya está. Son eso: modelos de lencería. Nada más.
Para mí no son ningún ejemplo ni modelo a seguir en mi vida, ni en nada. Ni siquiera sabía que existían antes de ver la campaña.
(Tal vez me la pele tanto el modelo de perfección que promueve VS porque ya tengo 33 años, he llegado a un punto de aceptar mi cuerpo como es, y ya no tengo el chichi pa' farolillos. Paso de amargarme por tener una talla u otra. Tal vez, este mismo mensaje a una adolescente insegura le afecte de otra manera. Tal vez. Probablemente).

La publicidad nos vende eso. Un ideal. Un mundo ideal donde todo el mundo es guapo, esbelto, sano, huele bien, tiene los dientes blanco nuclear, no le salen arrugas ni manchas, no tiene pelos donde no toca y los tiene donde sí hay que tenerlos, todos los bebés son preciosos y no lloran ni dan por saco, la menstruación es de color azul y ni se nota ni duele, la ropa siempre queda blanca, el sexo es siempre espectacular, etc etc.

Joder, que somos adultos inteligentes, ¿no? Que tenemos capacidad de discernir. ¿O todavía dejamos que nos la cuelen?

La publicidad es eso: una gran mentira para vender. Esto no es nuevo. Y no debería amargarnos la existencia.
Que sí, que estoy de acuerdo en que la publicidad debería ser más ética. (Muchas cosas deberían serlo, y sobre todo, muchas más personas deberían serlo).
Es verdad que ese ideal que se nos presenta debería más realista, más cercano a la vida real. Pero ¿qué queremos? Es publicidad. Creérsela a pies juntillas es como creerse las pelis de Hollywood.

Por otro lado, no sé de qué c**o se extrañan algunas ahora. Estamos hablando de VS. Sí, sí, la misma firma que todos los años por Navidad organiza un famoso desfile con súper modelos disfrazadas de ángeles.
A todo el mundo que conozco le encanta el desfile. Es como la final de la Superbowl. Una tradición que todo el mundo ve.
Nadie se indigna al ver a esas tías de medidas imposibles y unas piernas interminables, contonearse con esos sujetadores de brillantes y esas alas.
Nadie ve nada malo en ello. A la gente le encanta el espectáculo. (Quizá no saben que esos "ángeles" de VS, esas topmodels, han tenido que estar las 72 horas anteriores al desfile ingiriendo sólo líquidos).

Nos indignamos con una campaña publicitaria cuyo eslogan es ciertamente desafortunado, pero no nos indignamos ante un desfile de mujeres cuyas medidas muy poco o nada tienen que ver con las medidas de la mujer media norteamericana, europea o de cualquier otro lado del planeta.

Nos molesta que VS nos diga que eso que saca en su campaña es un cuerpo perfecto. Pero no nos molesta que para su desfile más famoso saque a tías como Adriana Lima o Miranda Kerr, en vez de sacar a mujeres con unas medidas más reales.

Y esto, ¿no es también un ideal inalcanzable?


No sé, ante todo, coherencia. Si VS es proanorexia, o pro ideal de belleza inalcanzable, lo es siempre. En sus campañas, en sus desfiles, en su tallaje, en todo. Conclusión: no compres nada de esa marca. (Que luego, las indignadas con esta campaña son las mismas que pierden el culo por ver el desfile de Navidad y comprarse un sujetador de la marca).

Vale. Aceptamos que VS lanza una ideal de belleza poco o nada realista, y que por tanto, fomenta el descontento de las mujeres con su propio cuerpo. Pero... ¿acaso es la única firma que lo hace? ¿Acaso las demás firmas de lencería fomentan una imagen mucho más realista del cuerpo humano, ya sea femenino o masculino?

OYSHO


WOMEN' SECRET

CALVIN KLEIN UNDERWEAR


INTIMISSIMI

En honor a la verdad, tengo que reconocer que Intimissimi es la que más se acerca al mundo real. La que tiene más tallas y unas modelos más curvilíneas. (Es donde me suelo comprar yo la ropa interior). 

Pero tampoco es que para su publicidad recurra a tías del montón, precisamente. La modelo en este caso es Irina Shayk. Lo que se dice una tía "normal", de ésas que te encuentras todos los días por la calle. #miscojonestreintaysiete.
En cuanto a Oysho, me parece que en la mayoría de los casos es una firma para preadolescentes. Yo no me puedo comprar sujetadores de esta firma. Con una 95C, no me caben, señores y señoras. Y Women'Secret, pues según modelos me quedan mejor o peor. ¿Me traumatiza? Pues no. No compro y punto.

Como se puede ver, estas firman no sacan para sus campañas a gente con unos kilitos de más. No sacan a gente del montón. No sacan a gente mayor, con arrugas y flaccideces. Sacan a gente joven, alta, guapa y esbelta. Porque supuestamente los diseños lucirán mejor sobre cuerpos delgados que sobre un cuerpo con unos kilos de más. (Esto es cuestionable, ciertamente).

Con esto quiero decir que sacar a tías esculturales unas veces, (y escuálidas otras), lo hace VS, y lo hacen casi todas las firmas de moda. Lo vemos en las pasarelas. Lo vemos en el mundo de la moda en general.
¿Que es una mierda? Sí. ¿Que es una dictadura? También, si aceptas someterte a su dictado. ¿Que es falso porque no refleja el mundo real? Totalmente. 
Pero por eso mismo, porque no refleja el mundo real, porque es algo ficticio, porque es Photoshop, no debería afectarnos tanto. De verdad. Creo que aquí nadie aspira a ser modelo de VS, ni de Oysho, ni nada de eso.

¿Que VS dice que esos son cuerpos perfectos? Pues muy bien. También Coca-Cola dice ser la chispa de la felicidad, y no es más que una bebida con gas. 
Publicidad, nada más.

En lo que sí estoy bastante de acuerdo con la opinión de las indignadas es que la campaña es racista. Me faltan chicas de otras etnias en esa foto. Pero volvemos a lo mismo: no es representativa de la realidad. 
Tiene "gracia" que VS sea una marca made in USA. El país donde más gordos hay. Y también donde hay más mezcla de etnias y culturas. 

Y bueno, como suele pasar, a río revuelto, ganancia de pescadores. Ante la polémica desatada por VS (que tuvo como respuesta miles de tuits con el hashtag #iamperfect e incluso una campaña para recoger firmas en Change.org), otra marca de ropa interior, Dear Kate, ha sabido aprovechar el tirón y ha contraatacado con una campaña alternativa:


Está muy en la línea de lo que hicieron en su día Dove y The Body Shop. ¿Qué os parece?
Desde luego, han sido listos y rápidos. Imagino que habrán multiplicado sus ventas a costa de VS.

Pero me pregunto, si no hubiera sido por la campaña de VS, ¿creéis que esta firma, Dear Kate, sacaría a chicas con cuerpos normales, alguna incluso con bastante sobrepeso, en una campaña suya?

Pista:


Yo creo que aquí cada uno utiliza sus armas como mejor le conviene, para vender bragas y sujetadores, que es de lo que se trata... Aun así, aplaudo la contracampaña de Dear Kate, como en su día aplaudí las de Dove y The Body Shop.

Por cierto, leyendo tuits con el hashtag #iamperfect, me encontré con esto.



Y creo que nada mejor para acabar este post.

**EDITO: Después de estar diciendo todo el rato que son 8 modelos, me doy cuenta de que son 10. Ya no sé ni contar. 

2 de noviembre de 2014

Coming back... (again)


¡Hola a todo el mundo! Cuánto tiempo, ¿no?
-Ya te digo...
Si es que me paso la vida yéndome y volviendo... Soy un puñetero caso.

Bueno, mientras paso el aspirador y la mopa al blog para quitarle las toneladas de polvo y telarañas que ha acumulado en estos casi 8 meses de abandono, voy a intentar poneros al día brevemente de lo que ha acontecido en mi vida en todo este tiempo.

*Empezaré por EL ACONTECIMIENTO: la BODA. :_) Todavía estoy en una nube de algodón rosa.



Pues sí: JJ y yo nos casamos a principios del mes pasado, y la verdad es que fue un día inolvidable, precioso, maravilloso, genial... Un día per-fec-to.
Él estaba guapérrimo y súper elegante con su chaqué (nunca pensé que con una indumentaria tan clásica se pudiera desprender tanto sex appeal).
Está mal que yo lo diga, -y obviamente no puedo ser imparcial y pensaréis que me ciega el amor, pero joer, estaba tremendo. *__*

En cuanto a mí, me sentí cual princesa Disney con mi vestidazo.
Disfruté muchísimo. Todos lo pasamos estupendamente. Lloramos, reímos, nos emocionamos, bailamos, comimos... Lo dicho: fue un día perfecto.

Sólo le puedo poner un pero: y es lo rápido que se pasa. Ya me lo decía todo el mundo: "Disfruta del día, que se pasa volando." Y tenían razón.
Ahora casi un mes después, no puedo evitar sentir un poquito de morriña...
Puf, me volvería a casar mañana mismo. Una y mil veces.
Mil a lo mejor no, que sino podría parecer eso el Día de la Marmota, pero vaya, que no me importaría revivirlo alguna vez más.
Pero bueno, siempre nos quedarán las fotos.

En cuanto a los meses de preparativos, pues aunque es una etapa bonita y divertida, también fue un tanto estresante por mi tendencia a agobiarme y ponerme siempre en lo peor: que no me diera tiempo a prepararlo todo, que se me olvidara algo importantísimo, que algo pudiera salir mal (tipo tropezarme con el vestido y caer de bruces ante un centenar de personas), que ese día cayeran chuzos de punta o soplara un tornado; que la peluquera o el fotógrafo... o peor aún, ¡el novio!, no se presentaran ese día... O todo junto a la vez, en plan el Universo al completo conspira contra mí.

Pero nah, al final, todo salió a pedir de boca; mejor incluso de lo que hubiera imaginado. Ni llovió, ni hubo tornado, ni tsunami. Tampoco tropecé con el vestido, aunque me lo pisaron muchas veces y acabó bastante sucio, el pobre. ¿Pero qué importaba eso? Disfrutamos como enanos. Fue sin duda el día más feliz de mi vida.

Va, ahí os dejo una foto de espaldas, y así podemos seguir en el "economato", como diría Gordipé. ;)



*Más cosas: la luna de miel. Fuimos a Nueva York y nos encantó...
¿Cómo no nos iba a gustar? Si es que eso no es una ciudad. Eso es un parque temático. Una piscina de bolas, pero para adultos.
Bueno, en realidad, para adultos, ancianos, adolescentes, niños... Es imposible que no te guste NY. Es imposible aburrirse, tengas la edad que tengas. Hay millones de cosas para entretenerte.
Y sobre todo: es imposible no gastar. Siempre encuentras cosas molonas, y además, baratas.
También es imposible hacer dieta. Aquello es el paraíso del consumismo y la comida grasienta pero deliciosa.
Y es imposible que no te salgan ampollas en los pies. Aunque lleves calzado cómodo.
Pero vaya, quién pillara otra vez esos paseos por Central Park, esas caminatas por Lexington Ave, esas visitas a tropecientos museos, o esas carreras para pillar el metro.

Ains... espero volver alguna vez más, porque me fascinó la ciudad, su gente, su ritmo, su dinamismo...

*Más cosas: en el plano profesional, JJ y yo seguimos en el paro. Nad nuevo bajo el sol, en ese aspecto.
Tampoco es que hayamos buscado trabajo muy activamente, ya que para este nuevo año académico hemos apostado por la formación.
Después de mucho pensar, debatir, cavilar, darle vueltas a la pelota, y otra vez pensar y valorar, allá por el verano decidimos matricularnos en un máster del Universo. Bueno, del Universo no. En realidad es de Marketing, esa cosa que está ahora tan de moda y que te piden casi para cualquier puesto de trabajo.

Nos hemos dejado buena parte de la indemnización del despido en la matrícula, pero confiamos en que va a ser una gran inversión.
Tenemos amigos y conocidos que han hecho ese mismo máster en años anteriores, y la verdad es que todos nos han hablado maravillas y nos lo han recomendado.
Todos, sin excepción, han mejorado su situación laboral y su perfil profesional tras la realización de este postgrado.
Así que nosotros esperamos no ser menos, y confiamos bastante en que nos ayude a ampliar nuestro CV, y a poder optar a más salidas laborales.

Eso sí, también nos han dicho que va a ser un año duro, ya que es máster con un alto nivel de exigencia. Hay que currar, y mucho.
Así pues, vuelvo al cole, 10 años después de acabar la carrera... Quién me lo iba a decir.
Recuerdo que hace años, veía los másters como si fueran algo muy lejano a mí. Algo que me gustaría hacer, pero que intuía que jamás haría. Demasiado caro, demasiado complicado.
Pues vaya, quién me lo iba a decir a mí hasta hace poco. Al final, voy a hacer un máster. Con dos cojones. (¡Socorro!)

Deseadnos suerte, porque la vamos a necesitar. Nos espera un añito intenso de empollar libros, hacer estudios de mercado, aprender cosas que no sabíamos ni que existían, hacer trabajos en grupo y un proyecto fin de máster.

En cuanto al blog... ¡Ay, el blog! Además de los siglos y siglos sin actualizar, tal vez os hayáis dado cuenta de que han desaparecido casi todas las imágenes. Incluida la que tenía antes en la cabecera.
Y que en su lugar hay como unas señales triangulares de peligro.
Bien, las imágenes no han desaparecido. No han muerto, ni estaban de parranda.
Las borré yo sin querer, que soy así de lers.

Como sabéis, Gmail (Google), en su afán de secta globalizadora, se empeña en que tengamos todos sus "productitos" vinculados (cuenta de correo Gmail, Google +, Picasa, blog de Blogger, etc). De modo que las imágenes que yo tenía colgadas en el blog aparecían también en las imágenes de mi cuenta de Google+.

Cuando me di cuenta de ello, entré en pánico. Pensé que mis escasos contactos de esa red social (que son gente de mi ámbito 1.0) podrían llegar hasta mi blog pinchando en esas imágenes. (Error)
Y como mi blog sigue siendo anónimo, o al menos ésa es la idea, pues eso: gotita de sudor frío deslizándose por mi frente. Me dio el yuyu.

Y claro, con miedo no se piensa bien. ¿Qué se me ocurrió? ...
Muy bien: borrarlas todas de mi perfil de Google+ (pensando inocente de mí, que no desaparecerían del blog).

El caso es que desaparecieron (de Google+, de Picasa y por ende, del blog) en el momento en que le di a borrar. Y ahora creo es imposible recuperarlas. Vamos, que la he liado parda.

Ahora sé que lo que tenía que haber hecho (y haré a partir de ahora) es asegurarme de que esas imágenes no las comparto con mis contactos de Google+, en vez de pulsar el "botón rojo".
Pero ya digo: me agobié, me precipité, y las borré casi todas sin pensar en las consecuencias.

Y obviamente, no voy a ponerme ahora a subir una por una todas las imágenes de casi 5 años de blog. Me da mucha pereza.
Pero claro, así sin imágenes, el blog se ve muy soso, la verdad. Como que no invita mucho a visitarlo, ni a actualizar.

Entonces... entre que he estado bastante liada con los preparativos de la boda, que nuevamente estaba en crisis de ideas para escribir (y no quería saturar al personal con el tema bodorrio), y después de perder las imágenes, que le daban alegría y vidilla al blog, pues eso: 8 meses sin postear.

Como siempre que estoy siglos sin actualizar, me he planteado seriamente cerrar el blog definitivamente. Pero no me atrevo. Y no quiero, porque sé que si lo hago me voy a arrepentir.
También pensé en abrirme uno nuevo y empezar de cero. Pero es que también me da pereza.

Así que nada, después de darle vueltas al tema, aquí me he dejado caer de nuevo. (Ya, ya sé que soy cansina de cojones).

Vuelvo con propósito de enmienda, y con el firme deseo de volver para quedarme.
Pero es eso: un deseo. No puedo prometer nada, y menos con el tema del máster. Aunque lo intentaré.

De momento, estoy apañando el blog, dejándolo mono y añadiendo alguna imagen, para que que no dé penita verlo. Que parecía que lo habían expoliado.
Lo he redecorado un poco y le he cambiado el diseño. A ver qué tal. A ver si con la nueva imagen, me motivo.

Y, de momento, eso es todo.
Por supuesto, muchas gracias a los que habéis seguido visitando mi blog y comentando durante mi prolongada ausencia. Gracias de verdad. Yo he seguido leyendo en silencio a muchos... Desde los tejados.

Besos a todos y todas. I'm back.  :)

HELLO!

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No acepto solicitudes de intercambio de enlaces. En mi opinión, enlazar un blog es algo totalmente voluntario y desinteresado. Bienvenid@ y gracias por pasar por aquí. :)