De comentarios, acampadas y movimientos sociales

¡Hola a tod@s!

Lo primero, me gustaría daros las gracias a todos los que comentáis habitualmente en mis entradas. Me hace muchísima ilusión, ya lo sabéis, que participéis y me deis vuestra opinión sobre lo que expongo en cada una de ellas.
Y a los que me leéis pero no acabáis de decidiros a dejarme vuestro comentario, por favor, ¡no seáis tímidos! Aunque vuestra opinión sea radicalmente opuesta a la mía o aunque penséis que a lo mejor vais a decir lo mismo que yo, y que para qué repetir...¡¡No importa!!

Todo comentario aquí vertido será siempre bien recibido... (Siempre que no sea ofensivo, claro está). Ya lo digo en el mensaje de cabecera del formulario de comentarios: "¡Quiero saber TU opinión!"
Me encanta leer vuestros comentarios. Me alegra muchísimo mirar mi bandeja de entrada y ver que tengo nuevos comentarios de gente: tanto de nuevos lectores como de viejos amigos del blog. Así que...

Me suele pasar que, en el mismo día en que publico una entrada, recibo varios comentarios, y con suerte, recibo alguno al día siguiente; y como mucho, dos o tres días después de publicada. Pero luego.............. Se acabó. Ya nadie comenta, salvo alguna excepción. :/
Es como si esa entrada hubiera caducado. Como si ya no interesara. Es como un periódico, que pasado el día en el que sale a la calle, se queda desfasado.
Así que tengo que escribir otra nueva entrada para volver a atraer la atención y recibir nuevos comentarios.

Yo creía que eso era lo normal, pero luego he visto algunos blogs con entradas muy antiguas que siguen recibiendo montones de comentarios a día de hoy.
Cierto es que se trata de blogs con un gran número de seguidores, y parece que sus entradas siguen suscitando interés, incluso 10 meses después de ser publicadas.

Por otro lado, me sorprende la desproporción tan grande que hay entre visitas y comentarios. Este blog recibe una media de 100 visitas diarias... Lo cual no está nada mal. Gracias de nuevo.

Pero, luego, mis entradas no suelen pasar de los 10-15 comentarios. (Muchas veces, contando mis propios comentarios de respuesta a los vuestros).
Me parece muy raro.

Ya sé que muchas de esas visitas son accidentales: gente que llega a mi blog buscando "algo" en concreto (ya sabéis: tetas, sexo, gatos, chicas con minifalda... Lo típico. Algún día haré la típica entrada sobre cómo llega la gente hasta aquí), y al no encontrarlo, se las pira ipso-facto.
Pero... Quiero creer que no todos los que entráis aquí pertenecéis a ese grupo de visitantes accidentales. Quiero creer que muchos (o algunos) os quedáis porque os interesa realmente lo que pueda decir y estáis el tiempo suficiente como para leer alguna entrada.

Bien: a todos esos que me leéis con interés y no decís ni mu, (no me refiero a que no comentéis en todas las entradas: eso es normal, yo tampoco comento en todas las entradas de los blogs que sigo, porque es materialmente imposible; me tendría que dedicar sólo a eso. Me refiero a los que me leéis de forma habitual y nunca me habéis dejado ni un "Hola"). A todos esos, les pregunto: ¿A qué estáis esperando? ¿Por qué os vais sin siquiera saludar? Que no me como a nadie... :)

Me bastaría con algo tan sencillo como: "Hola, me llamo XXXXXX, soy de YYYYYYYYYYYYY y leo tu blog desde hace ZZZZZZZ. Quiero que sepas que me encanta/me mola/me aburre soberanamente/me parece una auténtica mierda, etc. lo que escribes. Un saludo, adiós". 
E incluso me parecerá genial que me invitéis a visitar vuestros blogs, si los tenéis: "Éste es mi blog: gjgfklglgjlgnlgmslkgnsglfmlskgmslkgm.blogspot.com. Pásate!".


No sé, estaría guay. Me molaría infinitamente, la verdad.
Pero claro, eso no es algo que se deba pedir, sino que debe surgir de forma espontánea. 
Y ahora mismo, al releer la entrada, me estoy sintiendo hasta ridícula al pediros que comentéis. [Modo Pedigüeño ON].
Sí, ahora mismo me siento como los políticos, pidiendo desesperadamente nuestro voto, en estos últimos días de campaña.

Con todo, y llegada a este punto, quiero dar las gracias nuevamente a los incondicionales, a los que pasáis por aquí con frecuencia y me dejáis comentarios de tanto en tanto. Cuando podéis, o cuando os apetece.
Se agradece muchísimo, y no puedo pediros más, porque también sé que, cuando se siguen varios blogs, es cada vez más difícil sacar tiempo para atenderlos bien a todos.
Yo misma debo reconocer que últimamente me paso poco por los vuestros... No es vagancia ni falta de interés. Es porque no tengo mucho tiempo, de verdad. (Ya veis que también publico con mucha menos frecuencia que antes).
A vosotros, fieles lectores, amigos bloggueros, no os puedo pedir más. Al revés: os estoy súper agradecida por esa fidelidad.
Por cierto, si ya me quejo de tener pocos comentarios, encima el otro día, no sé qué narices le pasó a Blogger, que me han desaparecido un montón de comentarios vuestros en mi última entrada. Comentarios interesantísimos, por cierto. También desaparecieron los que escribí yo como respuesta. :/ Lo bueno es que, al menos, los conservo en mi cuenta de correo.

Mi reivindicación va hacia esos visitantes y/o lectores anónimos, que pasan de puntillas y no dejan siquiera un rastro, una huella. ¡Me gustaría conoceros! Sé, por el contador de visitas, que me lee gente de todos los puntos de España... ¡Y del extranjero! Sobre todo, de Latinoamérica: Argentina, México, Perú, Chile, Ecuador. Y del resto de Europa, también.

¡¡HOOOOOOLAAAAAAAAA!! ¿HAY ALGUIEN? :)
Me encantaría que me dijerais algo. Aunque sólo fuera un saludo.
Dicho lo cual, paso a [Modo Pedigüeño OFF].

Y ahora, a otra cosa: ya que he nombrado antes a los políticos desesperados pidiendo el voto.... Y viendo lo que está ocurriendo en España desde el pasado domingo 15 de mayo, -algo histórico, aunque algunos piensen que no sea más que una revuelta de "perroflautas" antisistema, de comunistas radicales o, como se ha dicho por ahí: ¡¡¡de etarras!!!- sólo quería expresar, desde aquí, mi apoyo a los movimientos #DemocraciaRealYa, #spanishrevolution, #yeswecamp, #acampadasol, etc.
Es algo que he seguido muy de cerca, pues tengo cuenta en Twitter desde hace tiempo, aunque no la tenga vinculada al blog (no quiero mezclar ambas cuentas).

Por fin se oye la voz indignada del pueblo. Que es realmente, el soberano, no lo olvidemos.

Creo que ya era hora de que los ciudadanos se plantaran, y les hicieran saber a esos tipos que sólo se acuerdan de nosotros una vez cada 4 años, que ya está bien, que ya basta, que ya estamos hartos de que jueguen con nuestros derechos, con nuestro dinero, con nosotros, como si fuéramos marionetas.
Que ya está bien de bipartidismo, que al final, se ha demostrado que son los mismos perros con distintos collares. Que no nos engañan.

Que estamos hartos de tanta corrupción, de tanto amigote enchufado con cargo y sueldazo en el Ministerio o la Consejería de lo que sea, de tanto chorizo, de tanto diputado y alcalducho con cochazo y sueldos millonarios.
Que somos nosotros, los ciudadanos, los que sufrimos la crisis, el paro, los ERES, los servicios públicos cada vez más desbordados y de peor calidad, la privatización, la subida de los precios, la congelación de los salarios, las pensiones de mierda, las hipotecas estratosféricas, la tiranía de los bancos............................. ¿Sigo?

Que la solución no es la abstención (la abstención favorece al partido más votado), que tenemos un derecho fundamental, que es el derecho al voto. Tenemos el poder...
Pero hay que saber bien a quién se lo otorgamos. Porque de ello dependerá lo que pase a partir del domingo.
Y a lo mejor, después del 22-M no pasa nada; a lo mejor, las cosas no cambian sustancialmente. Pero creo que se ha dado un paso importante. Creo que los ciudadanos están/estamos dando muestras de que no somos una masa sin criterio. Que no somos imbéciles, ni indiferentes.
A los políticos de los grandes partidos en el poder se les están poniendo por corbata: a ver si se les va a acabar el chollo. Ellos, que se las prometían tan felices, no se esperaban esta respuesta popular. 

Por eso, si estáis de acuerdo con esto, si también estáis hartos de más de lo mismo, os animo a participar y colaborar en este movimiento, que es apolítico, por mucho que algunos quieran enarbolar la bandera de la conspiración.
Ya sea a través de las redes sociales, difundiendo el mensaje de indignación, ya sea acudiendo a las acampadas que hay por toda España. Allí se reúne gente de todo tipo, de todas las edades, con diferentes situaciones personales: pero todos, con ganas de que la cosa cambie, de que no siga todo como hasta ahora, porque la situación es ya insostenible.

Ojalá que el espíritu de #acampadasol siga presente durante mucho tiempo, y no se difumine una vez pasadas las elecciones.
Y ojalá éste sea el primer paso para un cambio que es necesario... Y el primer paso de un futuro mejor para los ciudadanos de este país.


http://democraciarealya.es/
http://yeswecamp.org/
http://tomalaplaza.net/2011/05/18/manifiesto-acampada-sol/
http://twitter.com/#!/acampadasol