8 de diciembre de 2011

Pseudoperiodistas mediocres

Hace más de un mes que no publico nada en el blog. Sí, lo sé. Lo tengo abandonadísimo.
¿Razones? Muchas, pero se podría resumir en una palabra: desgana. Dejadez. Desidia.

Estoy en una etapa de mi vida -especialmente en el ámbito profesional- en la que me siento en punto muerto. Lastrada. Atascada. Sin avanzar. Incluso me atrevería a afirmar que voy para atrás como los cangrejos.
Hace un año y medio, mi jefa (de entonces, que afortunadamente ya no está, porque menuda lumbrera...) me trasladó a una sección nueva en la que entré con mucha ilusión, y con ganas de comerme el mundo, de aprender cosas nuevas, de probar el ritmo de la radio del fin de semana, de mejorar, de hacer muchas cosas interesantes...

Pues bien: año y medio después, todo ha quedado en agua de borrajas.
Ahora me encuentro con que cada vez tengo menos responsabilidades asignadas. Las tareas que hago son monótonas, poco gratificantes. Las podría realizar hasta el becario más inexperto.
Es más: hasta la becaria que tenemos hace cosas de más relevancia que yo.

Lo he hablado con la coordinardora de la sección, de buen rollo, pidiéndole más trabajo, más tareas, hacer otras cosas de más responsabilidad, porque sé que soy plenamente capaz (ya las he hecho anteriormente y sé que puedo).
Le he dicho que la becaria va demasiado agobiada de trabajo, que la pobre no puede más, y que necesita ayuda. Además, se le han asignado unas tareas que, con todos mis respestos para la chica, no creo que una becaria recién licenciada sea la persona más idónea para hacerlas, ya que le falta experiencia.

Una cosa es que a los becarios se les dé tareas, que hagan cosas, que aprendan, que no estén para llevar cafés y ya. Y otra, encargarle el 60% del peso de la sección, por muy trabajadora que sea (que lo es). Porque no es sólo cuestión de tener capacidad de trabajo, sino de tener experiencia, de saber cómo se hacen determinadas cosas, de ser resolutivo y tener recursos. Y eso, sólo lo dan los años de oficio.
¿Estamos locos o qué? Así va la pobre chica, de culo, y pidiendo ayuda porque no puede más.

Reacción de la coordinadora cuando le planteo esto: o se pone a la defensiva, porque piensa que estoy cuestionando su autoridad y su criterio, o me insiste en que no quiere sobrecargar a nadie. Que hay gente suficiente en el equipo para repartinos bien las tareas y que nadie vaya sobrecargado de trabajo. 

¿Hola? ¿Que nadie vaya sobrecargado? ¡Que se lo digan a la becaria, que va desbordada!

Ah, y si intentamos ayudar a la becaria, quitarle trabajo, facilitarle las cosas, proporcionarle documentación, etc... como se entere la coordinadora, ¡nos echa la bronca! Que la becaria tiene que hacerlo sola, que para eso está, para aprender y sacarse las castañas del fuego...  (No, no... ¡Por lo visto, está para explotarla salvajemente!).

Y mientras, los de plantilla nos aburrimos como ostras porque tenemos poco trabajo. Luego, no es extraño ver a periodistas jugando al Solitario, publicando en su Muro de Facebook o pujando en eBay, como ya comenté en mi anterior entrada.
¿Cómo lo veis? Alucinante...
A mí que no me fastidien, pero no creo que en ningún otro medio de comunicación del mundo funcionen las cosas así de mal. ¡Es el mundo al revés!

Y yo, mientras, me siento cada vez más desaprovechada, más desmotivada, más aburrida... Viendo cómo gente que entró más tarde que yo en esta empresa, ha evolucionado mucho más en todo este tiempo.

¡Quiero trabajar y no me dejan!
Porque la becaria tiene que aprender... ¡Vamos, no me jodas! A este paso, la becaria acabará presentando el informativo y los que ya llevamos tiempo, acabaremos haciendo fotocopias y llevando cafés a los jefes...
¡Es de locos! Y yo no soy una tía trepa, no quiero pasar por encima de nadie, no quiero ir de estrellita mediática. Lo que quiero es hacer cosas que me satisfagan y me llenen profesionalmente. Asumir retos, no hacer las gilipolleces que me asignan.
¡Yo no estudié una carrera de 5 años para esto, joder!

Pero claro, luego ves lo mal que está todo, sobre todo en el mundillo del periodismo, y entonces te tienes que callar y aún dar gracias a Dios de que tienes trabajo. Y encima, me debería considerar afortunada, porque no tengo un trabajo "estresante".  
Ya, pero es que justamente a mí me gusta la acción. Si hubiera querido vivir sin estrés, me hubiera preparado una oposición para funcionaria. O me habría ido a vivir al campo.
Un poco de "estrés" nunca viene mal. Es siempre un aliciente, una motivación.

Sobre todo porque estoy en un momento de mi vida en el que puedo hacer muchas más cosas. Se me puede exigir más.
No tengo hijos ni cargas familiares, puedo centrarme en mi profesión, puedo dar mucho más de mí. Tengo una cierta experiencia, mucha capacidad de trabajo, una formación bastante completa y estoy convencida de que puedo hacer mucho más. En ese sentido sí: soy ambiciosa. ¿Qué pasa? ¿Es eso malo?
No soy conformista. Yo quería aprender cosas nuevas y desde que estoy en esta redacción no es que no he aprendido nada nuevo sino que creo que he "desaprendido", (ahora que está tan de moda esa "palabra").

En fin... No sé qué hacer. Estoy muy desmotivada. Muy decepcionada. Y ya no quiero decir nada más a la coordinadora para no generar mal rollo en el equipo. Hago mis tareas y punto. No me exijo más porque nadie me exige más. Y ahora mismo, estoy dando un 40% de mí, cuando he llegado a dar el 200%, en otras épocas.
Tenía más estrés, tenía días duros, sí. Había veces que no sabía si podría hacerlo. Lo pasaba mal. Pero en el fondo, me gustaba. Me sentía bien conmigo misma, estaba motivada. "Eso" era ser periodista. No lo de ahora.

No sé, voy a dejar pasar el tiempo... a ver si cambian las cosas. Ahora tenemos nuevos jefes y creo que tienen intención de hacer cambios. Además, casi siempre, para Año Nuevo hay cambios. Ojalá.
Me da igual dónde me lleven. Lo que quiero es salir de esta sección donde ni se me valora, ni se me dan oportunidades. Y si no, empezaré a buscar otras cosas, tranquilamente.

A veces me da por pensar que me están haciendo mobbing. Porque tan malo es sobrecargar de trabajo a un empleado como tener desaprovechada a una persona que vale, asignándole tareas pequeñas que podría hacer otra persona con menos experiencia.
Pero no quiero ponerme en plan paranoico.

¡Y me tengo que morder tantas veces la lengua...! Porque veo actitudes lamentables: no hay ganas de currarse las cosas, no hay interés por hacer periodismo de calidad (empezando porque los que dirigen la sección ni son periodistas ni nada parecido; el intrusismo que afecta a esta profesión es de vergüenza), da igual todo, si sale un churro, pues no pasa nada; la ley que rige es la del mínimo esfuerzo, todo se hace de cualquier manera... Y así todo.

¿Y de esa forma pretenden hacer un producto de calidad, que sea competitivo, que guste...? Así es imposible.
Y se te quitan también las ganas de esforzarte, de pensar cosas novedosas, porque, total, no van a valorar tu esfuerzo y van a tirar por tierra tus ideas.

Mientras los pseudoperiodistas, enchufados, vagos y mediocres, sólo piensan en cobrar a fin de mes y en coger todas las vacaciones y puentes del mundo.
No perdonan ni un festivo ni hacen una hora extra de más. ¿Ellos van a hacer qué...? ¡Por favor...!

El trabajo desagradable y complicado se le endosan al becario (que cobra una mierda), pero sin siquiera asesorarle o darle unas pautas mínimas. Y a los periodistas preparados, con dignidad y con ganas de currar, les bajan los humos y les quitan toda ilusión a base de tareas chorras, para que se aburran, se acomoden  y se acaben contagiando de esa mentalidad, de esa mediocridad. Que no destaquen. Que no crezcan profesionalmente.
Les cortan las alas, les minan su ambición, para que acaben siendo tan mediocres y conformistas como ellos. 
Están fabricando periodistas con alma de (mal) funcionario. Y así nos va...


Forges, como siempre, inmenso...


17 comentarios:

  1. En otra época te hubiera dicho que lo que necesitas es cambiar de empresa a una en la que puedas evolucionar, pero está el mercado como para buscar otro trabajo.
    Sólo te diré que aproveches ahora que realmente no tienes cargas, porque cuando cumples los 30 (igual me columpio pero ahora mismo no sé si alguna vez nos has dicho tu edad) y buscas trabajo te ven mayor (lamentable pero cierto), solo te ven como un útero con patas que en cuanto te contraten te vas a poner a tener hijos... Es triste pero es la realidad que estoy viendo. Aprovecha para tratar de evolucionar laboralmente si es lo que realmente quieres porque contra más tiempo pase es más complicado hacerlo.
    Jo, qué pesimista estoy yo también jeje.
    Besos y me alegra ver que has actualizado!

    ResponderEliminar
  2. Ains, cómo te entiendo. Yo me siento igual de desmotivada. Encima parece que no tenemos derecho a quejarnos por ser periodistas y tener la 'suerte' de estar trabajando (ser periodista se está convirtiendo en un estigma de pringao).

    Has dado en el clavo con lo de los mediocres que se llevan la pasta e intentan taponar a los demás para que nadie destaque y al final parezca que son todos las misma mierda. Conozco a bastantes de esos expertos en exigir derechos, pero nada de cumplir con los deberes. Esto me revienta.

    La verdad que no creo que te estén haciendo mobbing. Simplemente tienes una coordinadora lerda perdida que estará a otras cosas (a muchos les da por atender sus blogs, twitter y demás) y no tendrá tiempo de organizar a su equipo. Eso pasa bastante en los medios de 'comunicación'.

    En estos años me he dado cuenta que es eso precisamente lo que falla en los medios: la comunicación. Lamentable.

    Y no sé cómo irá tu emisora de 'estrellas', pero yo curro en un periódico y esto está plagado... no sé qué cojones hacen en un periódico regional y no en el New York Times. Aquí la gente se da unos aires que flipas. Y, si encima trabajas en la web como yo, te pasan por al lado como si les debieras algo.

    Esta profesión está llenita de imbéciles. Nos vapulean y encima nos machacamos entre nosotros.

    Ay, qué a gustito me he quedado.

    ¡Por qué narices no habremos estudiado una profesión con futuro!

    ResponderEliminar
  3. Hola,

    Pues la verdad es que es una pena leer cosas así. Cuando uno empieza un proyecto o afronta un cambio profesional con ilusión y luego ve que no le dejan avanzar, siempre es frustrante.

    Ya que no puedes plantearte el cambio de empresa (está la cosa para muchos cambios..) yo me buscaría la vida por mi cuenta.

    Quiero decir, que si ahora mismo tienes tiempo de sobra, porque el trabajo no te agobia, podrías plantearte retos personales al margen del trabajo.

    Podrías ver la posibilidad de hacer algún curso que te ayude a formarte en algún área concreta de tu trabajo, algo que te interese y que te mejore como profesional.

    O podrías (no sé si será algo que te pueda "llamar") intentar colaborar con otros medios, como freelance. Eso quizás te podría servir en un futuro para pasarte a otra empresa, no sé.

    Quiero decir, que ya que en el trabajo no tienes agobios, no tienes que meter horas extras, puedes ver como sentirte realizada de otra forma. :-)

    Ánimo, que verás como en 2012 todo cambia.

    Besos,

    ResponderEliminar
  4. ¿Te has planteado empezar nuevos proyectos personales? Como, por ejemplo, volver a estudiar o retomar algo que su día dejaras aparcado... Entiendo que quieras recibir satisfacción del empleo para el que te has formado, pero si ves que por esa vía no llega, puedes investigar otros senderos...
    En todo caso, ¡te deseo suerte!
    Saludos

    ResponderEliminar
  5. Y asi estan las cosas... el periodismo ya iba nmal antes de la crisis, yo en los cursos de doblaje casi todos eran periodistas sin trabajo, o con curros de mierda. Es una pena. Si han intentado hablar con la coordinadora, y nada, pues trata de ir a una instancia superior. Mantente atenta a ver si hay algun cambio, y si no... la cosa esta fatal pero nadie dice que no puedas plantearte mirar otros trabajos, podria haber suerte.

    ResponderEliminar
  6. Hola, Raquel! Pues.... tengo ya los 30, los cumplí en agosto. :/ Entonces me ven como un útero con patas? De momento, no tengo intención ni de casarme ni de tener niños, al menos, a corto o medio plazo. Así que... tengo tooooooodo el tiempo del mundo para centrarme en mi profesión, asumir responsabilidades y retos. Y sí, soy muy consciente de que no es buen momento para buscar en otros sitios. Esperaré un poco, a ver si hay suerte y el año que viene hay cambios favorables. Si no, empezaré a buscar alternativas. Gracias! Un beso. :)

    ResponderEliminar
  7. Hola, Cris! Veo que esto de los mediocres que no dejan a los demás evolucionar, el intrusismo y las estrellitas mediáticas que se creen la hostia es algo generalizado en todos los medios de comunicación. Una pandemia, vamos! :(
    Genial eso que planteas de que justo lo que falta en muchos medios de comunicación es eso: comunicación.
    Donde yo trabajo, veo que la gente se ha acomodado y sólo quieren vivir tranquilos, cumplir un horario, hacer lo mínimo imprescindible, y pensar en vacaciones y festivos.
    Ya te digo: mentalidad de funcionario. Dónde quedó el espíritu periodístico, de currarse las cosas, de investigar, de buscar la noticia, de ir más allá? Dónde?
    En fin... Y sí, mi coodinadora es bastante lers. (Aparte de que ni es periodista ni sabemos qué formación tiene).
    Y no, no es que se centre en su blog o su Twitter. No tiene nada de eso, estoy convencida.
    Es bastante negada para las nuevas tecnologías, he tenido que solventarle muchas dudas sobre el funcionamiento básico de un Pc y de Internet. Es de la vieja escuela. Tan vieja que es rancia.
    Por no tener, no tiene Internet en casa ni en el móvil (una profesional de los medios sin Internet en casa, tócate los huevos! Cómo se mantiene informada?)
    Alucina...
    Y voy a dejarlo ya, que me enciendo!
    Un beso y gracias! ;)

    ResponderEliminar
  8. Hola, Pegasus! Pues sí, la situación profesional que estoy atravesando es bastante frustrante.
    No sé qué hacer... Y sí, me he planteado lo que dices, de hacer cursos para completar mi formación. En concreto, me atraen mucho los de locución. Pero hay un problema: los buenos se imparten en Madrid (yo vivo en Valencia, y esto, en lo que a medios se refiere es un pueblo pequeño, no hay nada), y además, valen un huevo.
    Las colaboraciones free-lance son otra buena opción, sí. Es cuestión de planteármelo, no sé...
    En cualquier caso, gracias por los consejos y a ver si en 2012 cambia mi suerte (a mejor! ) ;D
    Un beso!

    ResponderEliminar
  9. Hola, Saskia! Sobre lo de retomar antiguos estudios o proyectos aparcados, te cuento: cuando empecé a trabajar en esta empresa, retomé los estudios de ruso que había abandonado a mitad, poco a poco he ido sacándome cursos y este año estoy en el último. Si apruebo, me saco el título. Y se acabó.
    También dejé aparcados los estudios de música. Pero es que eso sí que requiere mucho tiempo y sacrificio.
    No sé... Igual me apunto a algún curso de algo relacionado con mi profesión.
    A mí me gusta mi profesión, ahora no voy a romper con todo y ponerme a estudiar Enfermería como está haciendo una antigua compañera de universidad.
    Lo único que pido es que me valoren y me den oportunidades. No creo que sea pedir tanto...
    Gracias! Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Hola, Nerea! Efectivamente, el mundo del periodismo está fatal. Corrompido total: lleno de vagos, enchufados, amiguetes de turno, niños de papá sin ningún talento, intrusos, acomodados, "estrellas" déspotas, engreídos, becarios súper explotados,... Por eso hay tanto paro en esta profesión y tan pocas oportunidades, porque está todo copado.
    Voy a mantenerme alerta a ver si hay cambios que me afecten. Si no... habrá que cambiar de estrategia.
    Un beso, gracias!

    ResponderEliminar
  11. Gata .
    Una putada , pero "palante" cursos , retomar proyectos..¡Lo que sea !
    Tu todavía lo sabes pero ...¡Eres tan joven! Y ¡la vida dá tantas vueltas!
    Tu comentarío en mi blog me dejo impresionada por lo bien que escribes.
    Así que todo lo que te propongas lo conseguirás ¡¡Ya vendrán tiempos mejores!!!
    Un beso

    ResponderEliminar
  12. Segun leia este post era como mirarme en un espejo, aunque yo no soy periodista y me dedico a otra cosa quiero decirte que en todas las profesiones pasa lo que has contado. Soy una persona inconformista como tu, que siempre quiere aprender, que quiere llenar su vida con todo lo aprovechable de ella y parece que los demas no lo entienden y hacen lo posible para que no ocurra.
    Es lamentable estar en una empresa donde no sean capaces de valorar y aprovechar el potencial de las personas. Yo he pedido cambios de departamento, formación, siempre he dado ideas, he intentado mejorar cada día, pero mira, he estado 4 años así sin recibir nada a cambio y siempre escuchando lo mismo "se agradece mucho tener personas con tu iniciativa e interes" pero se quedaba en eso...palabras.
    También llegaron los becarios, que hacían maravillosamente bien el trabajo, pero metiendo la pata hasta el fondo en muchas cosas en las que no se habían molestado en formarles, pero aun así, eran estupendos...
    Nos rodea gente insulsa, sin espíritu, sin ganas de superación, y grises, personas muy grises que apagan la iniciativa, la ilusión y las ganas de comerse el mundo que algunas personas tenemos.
    Después de sufrir un trato como el tuyo tomé la decisión de mejorar mi vida, y como? pues usando mi tiempo libre para hacer las cosas que realmente me llenan, y que me hacen sentir feliz..

    un abrazo

    http://menos1000ymas30.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  13. No sabes lo identificado que me he sentido leyéndote esta entrada, sobre todo con esa última frase... Por eso me he animado a comentar por primera vez, porque es terrible lo que pasa en los medios españoles, la nefasta gestión de los que mandan. Yo tuve unos cuantos añitos de experiencia en una agencia de cuyo nombre no quiero acordarme y muchas de las cosas que dices pasaban exactamente igual. No les interesa hacer un buen producto periodístico, ni mucho menos que la gente esté informada. Quieren salir del paso, que a nadie le caiga una bronca desde arriba (siempre y cuando no la echen ellos mismos a los de abajo, claro). No sé, es un auténtico desastre y, como dices, encima los que tenéis trabajo parece que tengáis que estar eternamente agradecidos al jefe que no sabe mandar por tener ese trabajo.

    Mucho ánimo, ojalá aciertes y las cosas se arreglen para ti con el nuevo año y esos cambios que siempre gusta hacer el 1 de enero en todas partes... Y no dejes que te quiten la ilusión, que no se merecen semejante premio.

    ResponderEliminar
  14. Hola!

    No creo que la tontería y el miedo a que les coman el terreno sean cosas exclusivas de los periodistas.

    Hoy en día, demasiados nos vemos dirigidos por personas con menor preparación que nosotros, con unas ideas nulas sobre cómo hacer las cosas y completamente faltos de capacidad resolutiva.

    El otro día, mantenía una conversación (con alguien no relacionado con mi trabajo) donde daba mi opinión y me atrevía a ofrecer consejo. Una, que es así de atrevida. Me pidieron que volviera a repetir, para coger notas... y me preguntaban por qué no mostraba esa parte de mí cuando iba a una entrevista.

    La respuesta fue que había probado ambas técnicas, y la gente no quiere a alguien que demuestre pensar por sí misma. De hecho y sin tener una preparación ni la mitad de buena que muchos de los parados que hay hoy en día, me han llegado a decir "cómo vienes a pedir este trabajo, con el CV que tienes? Tú ya tendrías que estar ocupando un puesto muy superior."

    Es así... Y el que está montado en la burra no va a dejar, bajo ningún concepto, que se le acerque nadie, así tenga que pisar a quien sea.

    Un besote! Y paciencia...

    ResponderEliminar
  15. Está la cosa muy mala en todos los ámbitos profesionales, el periodismo no iba a ser una excepción. Supongo que la Carbonero habrá pasado por lo mismo... ;P

    Besos.

    ResponderEliminar
  16. Mi querida Gata, yo me siento como tú muchas veces. Infra-aprovechada, infra-valorada... en fin, infra. Periódicamente paso de la apatía al encabronamiento y viceversa, cuando no conviven los dos, pero últimamente me pregunto si habré hecho todo lo que está en mi mano para cambiar la situación... Quizá la respuesta esté en no aceptar un no por respuesta... Besssos.

    ResponderEliminar
  17. Yo también me siento como tú. Estancada, en mi vida profesional, sentimental y familiar... espero, y deseo, que el tiempo cambie todo esto.

    ResponderEliminar

Los comentarios le dan vida a este blog. ¿Me dejas uno? ;)

HELLO!

Todo lo que leerás aquí es contenido propio. Si en algún momento hago referencia a algún escrito ajeno, citaré siempre la autoría.
Las imágenes que aparecen en el blog son tomadas de Internet. No obstante, si consideras que alguna no debería estar aquí, sólo tienes que hacérmelo saber y la retiraré al instante.
No acepto solicitudes de intercambio de enlaces. En mi opinión, enlazar un blog es algo totalmente voluntario y desinteresado. Bienvenid@ y gracias por pasar por aquí. :)